Pasos para una buena Retroalimentación

7 tips para una retroalimentación efectiva

La retroalimentación o feedback es una actividad esencial en cualquier organización comprometida con la mejora continua y la búsqueda de la excelencia.

 

Dar retroalimentación no se trata de decirle a la otra persona aquello que no te gusta o te molesta. Es una actividad que debe prepararse, pues de ello depende que obtengas los resultados esperados.

En esta entrega, te compartimos 7 tips para que tus sesiones de feedback sean todo un éxito:

 

1. La persona te debe importar.

La retroalimentación no es un reclamo ni un desahogo. No se trata de vociferar y culpar a la otra persona.

Asegúrate de querer cuidar y ayudar a la otra persona a lograr sus objetivos. Antes de dar retroalimentación debes darte a la tarea de investigar lo que la otra persona quiere conseguir.

 

2. Tiene que ser directa y amable.

Ser directos y amables al mismo tiempo pareciera una contradicción, pero no lo es.

Antes de comenzar a dar feedback debes tener claro lo que quieres decir. No es recomendable improvisar ni dejarse llevar por las emociones del momento.

De igual manera, asegúrate de avisar a la persona el motivo de la reunión.

 

3. Sé específico.

Basa tu retroalimentación en conductas concretas, no en sensaciones y especulaciones.

Enfócate en lo que la persona está haciendo y las consecuencias que se derivan de su comportamiento.

 

4. No personalices.

No critiques a la persona, sino su comportamiento.

Por ejemplo, en lugar de decir “eres muy descuidado”, puedes decir: “Esta semana descuidaste la entrega puntual de los reportes”

 

5. Asegúrate de que la otra persona lo está entendiendo.

Utiliza siempre un lenguaje claro y sencillo.

También pregunta ¿qué consecuencias crees que tenga lo que estás haciendo?

 

6. Responsabilízate de lo que sientes.

Al mencionar que algunos comportamientos de la otra persona te hacen sentir de determinada manera, asume la total responsabilidad por lo que sientes y no culpes a nadie por ello.

 

7. Apoya a la persona para que pueda conseguir lo que está buscando.

Uno de los principales objetivos de la retroalimentación es generar un plan de acción.

La pregunta ¿Qué se te ocurre que podamos hacer? te puede ayudar a definirlo.

No olvides tomar en cuenta estos tips para tu siguiente sesión de retroalimentación. Y no te preocupes si no logras la perfección al primer intento.

¡Recuerda que la práctica hace al maestro!